sábado, 28 de abril de 2012

LA CASA ENCANTADA DEL PUEBLO parte 1º

Érase una vez unos niños que estaban en su pueblo de vacaciones y se aburrían mucho porque no paraba de llover. Como todos eran muy atrevidos se fueron a las afueras del pueblo a una casa que la gente decía que estaba abandonada. Los chicos encontraron la casa. Y en uno de sus balcones había una radio. Uno de ellos la quiso coger pero estaba demasiado alta. Decidieron entrar en la casa pero estaba cerrada totalmente, así que rompieron el candado de la puerta y entraron. Ninguno de ellos, ni siquiera el más mayor, se atrevía a subir al piso de arriba. En uno de esos despistes, la puerta se cerró con un estruendo que los chicos se dieron la vuelta, a tal velocidad que no se dieron cuenta que a su derecha había una cama y algo que saltaba encima de ella. Los chicos asustados no sabían cómo salir. Uno de ellos, que no sabía lo que hacía, se sentó en la cama y empezó a rebotar como una pelota de pin pon en una colchoneta. Los mayores del grupo le dijeron al que se había sentado:
-¿Qué te pasa? ¿por qué estas rebotando? ¿estás nervioso?
El que estaba sentado contestó:
-No, es que hay alguien más en esta cama y en esta casa.
Cuando terminó esa frase todos empezaron a mirar por toda la casa como posesos. Entonces, una de las puertas de la parte de abajo se abrió y todos se metieron en esa sala. Un gran error por su parte, o no. La puerta se cerró y las luces se encendieron. Los chicos estaban asustados en medio de una biblioteca con un calendario del año 1992, y eso que estaban en el año 2022. Los chicos empezaron a tirar los libros al suelo para ver si encontraban alguna pista del señor o señora que vivía en esa casa. De repente, de uno de los libros salieron las llaves de la casa y los papeles del señor y de sus territorios. El libro se elevó como si alguien lo sujetara desde abajo. Los chicos aprovechando que tenían las llaves de la casa, abrieron la puerta y se fueron corriendo.
Continuará
Rubén de la Cal

martes, 3 de abril de 2012

EL ESPÍRITU DE NIELA

Hace unos años en una mansión  a las afuera de Londres, una niña alta, guapa sincera y muy simpática llamada Niela, celebra su comunión en esa mansión. La noche después de la celebración, la niña muere asesinada. No se sabe por quién, ni cómo. Pero el espíritu de Niela sigue allí. Ahora vamos a ver lo que le pasa a Megan en esta tenebrosa mansión.

Megan una niña perfecta según sus padres alta, guapa, inteligente, simpática y  graciosa. Se muda a la mansión donde habita  el espíritu de Niela. Una noche cuando estaba durmiendo una voz le dice:
-Megan hulle- le advierte la voz.
-¿Quién eres? ¿cómo sabes mi nombre? ¿qué quieres de mi?- le pregunta Megan.
-Soy Niela, el espíritu de Niela. Morí hace tres años tras celebrar mi comunión. Vete, corres peligro- Le contesta la voz.
-No me iré- replica Megan.
- Yo, ya te he advertido. Ahora, lo que pase dentro de unos días no será culpa mía- le dijo Niela.
EL espíritu se fue. Como dijo el espíritu Megan se daba cuenta de que corría peligro. La casa la intenta matar y cada día es más difícil sobrevivir. El espíritu se encontró con ella en un sueño o eso parecía:
-Megan, has muerto, has muerto envenenada- le dijo Niela.
-No puedo haber muerto, es imposible- se asustó Megan.
-Esos con los que has venido no eran tus padres, eran NACIS, los mismos que me mataron a mí. Nadie les puede parar, están por todas partes- le contesta Niela.


CONTINUARÁ.