lunes, 23 de marzo de 2009

Un castillo de cine

Había un castillo en lo alto de una montaña en donde nadie sabía que existía. Una vez, una niña llamada Ángela estuvo de excursión con el colegio a esa misma montaña, pero se separó de su grupo y se perdió. Entonces fue a buscarlo, pero se alejó más. Y vio el castillo a lo lejos. La niña estuvo media hora para pensar si ir o no ir. Ella decía:
-Si voy, a lo mejor, hay un malvado ogro como Shrek,pero más feo y malo, o también puede estar una princesa que me puede ayudar.
Ángela decidió ir, abrió la puerta y… ¡Era un cine con muchas salas! La niña entró en una de ellas que su titulo decía: “Sin Chan y el barco perdido”. Ángela entró y era como si estuviera allí dentro con Sin Chan. De repente Ángela cayó en el agua.
-Pero.. ¡qué efecto más chulo! Parece como si me estuviera mojando de verdad o…me he hecho pipi.
-Esto no es un efecto de cine, ni nada. Esto es un mar- dijo Sin Chan.
-Entonces, si esto es mar te puedo tocar y todo. Estoy dentro de la película.
Ángela estaba dentro de la película.

Ángela siguió a Sin Chan hasta el final de la película. Salió de ella y estuvo durmiendo del agotamiento. De repente algo siente en la mano, como un cosquilleo, se despertó y era una araña. Ángela se puso a temblar y a agitar la mano.
-¡EEEEEEEEEEEEEEEEHHH, PARA YAAAAAAA, QUE ME CAIGO Y ME MATO!- dijo la araña.
-Pero, ¡si puedes hablar!- dijo Ángela.
-Si puedo hablar. Me llamo Charlotte.
-Anda, como la tela de araña de Charlotte. Me gustó mucho esa película.
-¿Película? No soy una película.
Ángela se acordó de que el castillo era de cine y se podía entrar a las películas.
-Bueno, Charlotte, ¿quieres venir conmigo? Estoy espiando este castillo.
-Vale- dijo Charlotte entusiasmada.
Ángela y Charlotte subieron al último piso. Y vieron que la estructura estaba muy dañada hasta para derrumbarse de un momento a otro. Empezaron a oírse crujidos. bajaron al primer piso donde las salas. Estaba igual de dañado.
-Este castillo envejece muy rápido- dijo Ángela.
Empezaron a oír muchos golpes como si se cayera algo al suelo. Cada vez eran más fuertes hasta que vieron que el castillo se derrumbaba. Tuvieron que salir corriendo hasta la salida pero… la salida estaba tapada. Tuvieron que salir por la ventana. Pero estaba muy alta como para saltar.
-Puedo hacer mi tela- dijo Charlotte.
Empezó a hacer su tela y de repente: ¡PUM! explotó algo. Eran las máquinas reproductoras de cine. Todo estaba envuelto en llamas. Charlotte ya había terminado su tela. Ángela bajó corriendo por la tela muy resistente de Charlotte. Por fin llegaron abajo. Oyeron más explosiones hasta que el castillo explotó por los aires y lanzó a Ángela y a Charlotte unos pocos metros. Las dos salieron sin daños. Ángela y Charlotte se despidieron. Pero Charlotte ya no tenía hogar y Ángela le pidió que se quedara en su casa. Charlotte aceptó la invitación. De repente oyen unos gritos.
-¡Ángelaaa!
Ángela corrió hacia los gritos. Eran de los compañeros de clase. Ángela y Charlotte se fueron contentas a casa.

Daniel González

1 comentario:

DescargAll-Español dijo...

me parece mal expresado lo de tubieron que salir por la puerta pero estaba tapada y lo mismo con lode la ventana