EL DUENDE

Un día María iba corriendo y se tropezó con un duende y le dijo:
-¡Perdón, no te había visto!
-Como soy tan pequeño.

-¿Te has hecho daño?- le preguntó María.
-Un poco- le contestó.
-Yo soy Iván, el duende Iván.
-Ven conmigo, yo te curaré- le dijo María
-Gracias, me he perdido¿dónde estoy?
-Estás en la ciudad de Los Ángeles.
-Yo quiero ir a la plaza con mis amigos- le dice Iván.
-Yo te llevo, vivo en frente de la plaza. Nunca he visto un duende.
-Yo vivo en una casa abandonada.
-Te daré esta piruleta por el pisotón.
-Gracias, por la piruleta.
-Te llevo a tu casa.
-Pero no sabes dónde vivo.
-Si me vas diciendo.
- Vale, yo te dirijo.
Clara González